miércoles, 18 de noviembre de 2009

EMILIO VEGA MARTIN
David "el Negro Guerrero"
Transmitido: miércoles 04 de noviembre 2009


Hoy, he debido dejar de lado la colaboración que pensaba presentarles; la vida y su contraparte, paradójicamente, su extensión, la muerte, nos reclaman. Y es que debo referirme a la ausencia de un amigo querido, ausencia física, amigo que sigue entre nosotros a través del patrimonio auditivo y escrito que nos deja. Hoy, he debido dejar de lado, también, el teclado del ordenador. Lo que quiero transmitirles, elude el escribirse en ese instrumento tan impersonal, que me deja la sensación de que, no bien aparece el texto en la pantalla del monitor, deja de pertenecerme, convirtiéndose en códigos binarios fríos, impersonales, que moran en ese limbo ignoto que llamamos Ciberespacio. He debido, entonces, redactarlo a mano; hacerlo una legítima extensión de mí mismo, darle sobre el papel, la impronta de mis rasgos, para que, en todo caso, sea transferida posteriormente, a ese artilugio – el ordenador – que nos facilita el comunicarlo. Parafraseando a Silvio Rodríguez: David, Negro: Y ahora, ¿qué hacemos contigo? Con lo que nos dejas, con tu voz, con tus textos. Y ¿Donde ponemos lo hallado, con tu herencia? ¿Con todo aquello que en las emisiones radiales, en las voces, en las mentes de los que te han sucedido, se adivina tu escuela? Te aseguro que no has muerto; dejamos de existir cuando no dejamos en los sobrevivientes el patrimonio creado y otorgado a ellos; cuando nuestra voz deja de escucharse, que no somos leídos. Recuerdo que la última vez que charlamos, nos comunicaste, con voz no exenta de emoción, que pronto estarías de vuelta al aire, al alba. Volverte a escuchar a esa hora temprana, nos resultó gratamente balsámico. Luego, desapareces; nos llenamos de inquietud: ¿qué te sucedía? La hospitalización, siempre esperando que te recuperaras, que volvieras a enriquecer nuestro despertar....no pudo ser. David: Eres parte vigente del patrimonio cultural que explica, que cuestiona, que enriquece nuestra realidad, que le da sentido. De esta radio que tanto te debe. Y esperemos que tus semillas fructifiquen en nuevas mentes, nuevas voces, nuevos radiocuentos, nuevos talleres de radio que pueblen el ámbito sonoro y el Ciberespacio. Y contraviniendo aquella sentencia de Albert Einstein de que “ésta es una época de medios perfectos para fines confusos”, supiste concretar tu quehacer a través de utilizar los “medios perfectos para tus fines lúcidos” Hasta pronto, amigo.

http://pasealaredvirtual.blogspot.com/2009/11/sdeh-15-david-el-negro-guerrero.html

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